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Jan 04, 2024

Hogar de la semana: un verdadero espacio familiar en medio de la opulencia de Rosedale

El listado: 83 Glen Rd., Toronto Precio de venta: $3,795,000 Impuestos: $15,214 (2018) Tamaño del lote: 32 por 146 pies Agentes: Alison Cook, Chestnut Park Real Estate Ltd. Corretaje Uno de los más grandes de Rosedale

El listado: 83 Glen Rd., Toronto

Precio de venta: $ 3,795,000

Impuestos: $15,214 (2018)

Tamaño del lote: 32 por 146 pies

Agentes: Alison Cook, Chestnut Park Real Estate Ltd. Corretaje

Una de las mansiones más grandes de Rosedale se puede ver desde el patio trasero.

El principio, el medio y el final de la historia de esta casa es que está en Rosedale. Reducir una casa a su vecindario no siempre es útil, pero no se puede eludir el contexto de lo que es: una casa muy cómoda (4,100 pies cuadrados de espacio habitable si se incluye el sótano; cinco baños, cuatro dormitorios en cuatro niveles de características patrimoniales de buen gusto y actualizaciones modernas y elegantes) que tiene un precio que sorprendería a todos menos al público objetivo de este listado: Rosedalers o aspirantes a Rosedale.

La Asociación Histórica de Toronto resume sucintamente la “importancia relativa” del barrio: “Ha sido el lugar elegido para vivir por los ricos durante muchas generaciones”. Una vez que fue una propiedad de 200 acres parcialmente cultivada, a mediados del siglo XIX la tierra se estaba subdividiendo en vecindarios. Algunos lo describen como el suburbio original de Toronto.

Cuando Kym Morton vio la casa por primera vez, tenía esperanzas en Rosedale: residente de la cercana Cabbagetown, conducía por el área hace unos 7 años cuando vio los carteles de la jornada de puertas abiertas y decidió ver si podría proporcionar más espacio para sus tres hijos (que entonces tenían 11, nueve y seis años). "Siempre sentí que esta casa se siente bien... no ha sido cambiada ni convertida en una casa hecha con moldes". La agente encargada de la venta, Alison Cook, está de acuerdo en que, si bien algunos de los espacios se han modernizado, no han perdido su personalidad. “Hoy en día, muchos hogares son fríos y distantes, pero este es muy cálido y atractivo”, dijo.

"Lo que nos faltaba en Cabbagetown era luz, aquí había toneladas de luz... incluso en invierno todavía tenemos luz", dijo Morton. De hecho, la casa está llena de luz a través de ventanas en todos los lados, otra característica que falta en muchas casas nuevas en vecindarios establecidos, que hoy en día a menudo mantienen ventanas en la parte delantera y trasera para que los vecinos nunca puedan mirarse entre sí.

No es la casa más grande de la cuadra; Desde el patio trasero se puede ver una mansión nouveau impresionantemente grande, y otras casas cercanas cubren más lotes de tamaño similar. La estructura de ladrillo rojo tampoco es la más distintiva arquitectónicamente en el exterior (o en el interior), aunque fue construida en 1900 por el arquitecto de Toronto William Symons de Symons and Rae, quien construyó muchas de las casas emblemáticas en Rosedale. Pero a medida que recorre el espacio, su aplicación práctica es clara: esta es una casa para vivir, no un museo.

La sala de estar formal tiene una chimenea de leña.

Esta casa tiene todos los detalles que atraen a quienes aprecian las casas centenarias: rejas de hierro de gran tamaño en las rejillas de calefacción, techos abovedados en el piso principal con apliques de yeso floral, rincones y recovecos, pomos de latón de varias épocas, uno de esos Torres hexagonales en la esquina de la estructura común a los victorianos.

Las fotografías tomadas con cámaras instantáneas cuelgan de una pared en el nivel inferior.

Justo dentro de la puerta principal hay un pequeño vestíbulo con una explosión de pintura y papel tapiz de color púrpura, que se abre a un vestíbulo más formal con un pequeño rincón con ventanal orientado al sur (mirando a la pared del vecino). El vestíbulo conduce a una sala de estar formal con chimenea de leña, la cocina y el comedor y las escaleras a los niveles superiores. Las paredes de todo el nivel son todas blancas, lo que acentúa los pisos de roble marrón.

La obra de arte proporciona más color, gran parte del cual no fue proporcionado por los escenógrafos, sino por la colección de la familia. La pared que divide la cocina del comedor es extra gruesa para ocultar las puertas corredizas y está adornada con fotografías tomadas con cámaras instantáneas: ¡medios físicos en 2019! – lo cual es un recordatorio útil de que esta casa es para familias, para personas. En la cocina hay un vibrante tríptico de retratos de los niños, encima del tocador hay tres estantes llenos de proyectos de cerámica de muchos tonos de años pasados.

El protector contra salpicaduras agrega un toque de color a la cocina, mientras que en la pared cuelgan retratos de los hijos de los propietarios.Birdhouse Media

También hay toques de color más permanentes: el protector contra salpicaduras de la cocina detrás de la estufa es de un color marino claro, un corredor verde brillante en las escaleras agrega algo más de vivacidad, la pared exterior trasera se ha pintado de un rojo aún más brillante que el ladrillo rojizo existente. , aparecen más azules del océano en otros azulejos de otros baños.

Los propietarios anteriores actualizaron la cocina.

La cocina fue actualizada por los propietarios anteriores, hace aproximadamente una década, y hay una salida al patio trasero desde el comedor formal. El tocador aquí ha sido pintado con paredes de pizarra, aunque borraron los mensajes de los adolescentes de la familia. Hay una calcomanía de vinilo en la parte baja de la pared donde guardan los cuencos para perros de una figurita esquelética y las palabras “peligro de muerte”, es decir, hay toques caprichosos.

El comedor tiene salida al patio trasero.

El sótano tuvo que ser limpiado para venderlo: dos adolescentes y sus amigos habían hecho muchas cosas en las paredes, la pintura y los muebles a lo largo de los años que crecieron en la casa. Es un espacio limpio y luminoso con habitaciones separadas (un espacio grande alguna vez fue la sala de torneos de tenis de mesa de la familia), un mostrador en la isla cerca de la sala de lavado y una salida trasera acristalada al patio trasero.

Detrás de la cama de la suite principal hay un vestidor.

El dormitorio principal en el segundo nivel es una adaptación inteligente de la parte trasera de la casa: esconde un vestidor detrás de la pared que la cama usa como cabecera (astutamente, es posible que lo pases por alto hasta que camines por completo). También hay un baño principal modernizado con bañera profunda y ducha separada, y todo el vidrio, la piedra y la porcelana sobrios habituales están aquí para crear esa sensación de spa.

El baño privado está diseñado para brindar un ambiente similar al de un spa.

Un segundo dormitorio, de casi 20 por 10 pies, da a la calle, y al lado está el estudio familiar, que es el segundo piso de la torre y sus ventanales.

El tercer piso es todo espacio habitable, dos dormitorios ampliados en el ático con grandes ventanas altas, un baño privado compartido y mucho espacio de guardarropas.

Mientras recorremos la casa, la Sra. Morton confiesa que en realidad no quiere dejar la casa atrás, pero que es hora de comenzar un nuevo capítulo, con el traslado de su marido, Iain Morton, a Dubái (él es un ejecutivo y asesor general de Middle East). Grupo de Oriente y África de la multinacional francesa AccorHotels (propietarios de la marca Fairmont, además de Sofitel, Novotel y otros). Si fuera práctico llevarse toda la casa, o incluso sólo el columpio que trajeron de Cabbagetown, lo haría en un abrir y cerrar de ojos.

La banqueta de la cocina era uno de los espacios favoritos de los propietarios para reunirse.

Puede parecer extraño, pero en una casa razonablemente grande con varias habitaciones multifuncionales, los lugares donde se reunía la familia resultaron ser dos de los espacios más pequeños: la banqueta de la cocina de vidrio y acero inoxidable que está escondida en un rincón como un restaurante de la era espacial. y la acogedora sala de estar del segundo piso donde pasaban la mayor parte de las noches de ver televisión y jugar.

“Me encanta el concepto de intimidad familiar; si tu casa es demasiado grande, es más difícil de lograr; es algo así como: '¿Dónde están todos?'”, dijo la Sra. Cook. A la señora Morton también le desagradaban las casas que habían derribado todas las paredes y abierto cada espacio a todos los demás espacios; a ella le gustan las habitaciones con distintos propósitos y sentimientos. "Lo que me encanta de esta casa es que puedes tener privacidad o intimidad... y creo que ofrece ambas oportunidades", dijo la Sra. Cook.

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